Que no, que no estaba muerto estaba de parranda 🙂 Bueno, en realidad estaba trabajando y por eso os he tenido algo abandonados. Lo siento, ha sido un poco complicado compaginar mi nueva vida como madre trabajadora (fuera de casa) con los niños, la casa, el blog y todo a la vez.
En unos días os cuento como estoy estaba sobreviviendo a la vuelta al mundo laboral y como veo el tema de la conciliación en Alemania.
Hoy os traigo una receta facilísima y, que para ser un bizcocho, es de lo más saludable que os podáis imaginar. Solo lleva 50 gr. de azúcar moreno y no sabéis lo mucho que les gusta a mis hijos. Había probado en alguna ocasión alguna receta de bizcocho de plátano pero no sé porqué, no terminaba de convencerme. Esta es una receta vegana. No lleva huevos ni leche aunque podéis sustituir la leche de soja por leche normal o cualquier otra leche vegetal. En ese caso elegid una con cierta densidad como la de avena, mejor que la de arroz que suele ser más líquida.
He dado con la receta perfecta. Bueno, más bien me la he traído del trabajo pero no digáis nada que no lo saben 😉 Ingredientes fáciles y sanos que se mezclan todos a la vez y voilà…bizcocho esponjoso y sanote perfecto para la merienda o la tarde del domingo 🙂
¿Tenéis papel a mano? Vamos allá…
- 180 gr. de harina
- 1 sobre de levadura en polvo
- 1 sobre de azúcar avainillado
- 50 gr. de azúcar moreno
- 80 gr. de aceite de girasol o de oliva suave
- 50 gr. de sirope de Arce
- 80 gr. de leche de soja (o cualquier otra leche vegetal o leche normal)
- 3-4 plátanos maduros
- 80 gr. de nueces enteras
- Precalentar el horno a 175º con calor arriba y abajo.
- Poner todos los ingredientes en un bol, incluidos los plátanos que los cortaremos con las manos en trozos no muy pequeños (dos o tres trozos por plátano).
- Mezclar con cuidado, no queremos que los plátanos se deshagan del todo. Si tenéis KitchenAid con el accesorio de la pala y si no tenéis, con una cuchara de madera o espátula.
- Enharinar el molde con aceite y harina.
- Verter la mezcla y hornear entre 45-55 minutos a 170 grados. Comprobar con un palillo o cuchillo que está hecho.
- Sacar del horno y dejar enfriar sobre una rejilla y ¡a comer!
Podéis usar otros frutos secos. La última vez le añadí almendras filetedas y también quedó delicioso.
Podéis añadirle cacao en polvo. 50 gramos será suficiente y lo añadís con todos los ingredientes.
Las nueces las pongo enteras por que me gusta que se noten al comer pero podéis hacerlas más pequeñas si queréis. Lo importante es no "marear" mucho la mezcla, lo justo para que estén todos los ingredientes bien integrados.
¡Qué lo disfrutéis!
He tenido la suerte de probarlo y estaba buenísimo, incluso a pesar de ser el último trocito que quedaba dos días después de su elaboración. Hmmm!
¡Gracias Carmen! Pronto te llevo uno fresco del día que ahora no creo que estés para mucho backen 🙂